TÚ ERES MI HIJO AMADO; EN TI ME COMPLAZCO.
Dios del amor, Tú nos creaste a tu imagen y semejanza. Ayúdanos a abrir nuestros corazones y mentes para experimentar plenamente el amor incondicional que tienes por cada uno de nosotros. Permite que eso eche raíces en nuestras almas para que podamos ser verdaderamente las personas amorosas que nos creaste para ser.
¿Puedes pensar en alguien cuya fe en ti marcó una diferencia en tu vida? Comparte un momento en el que su aliento o apoyo te inspiró a dar un paso importante en tu camino.
3. HISTORIAS ALREDEDOR DEL MUNDO
Josh se graduó de la Universidad de Notre Dame en 2024 con un título en cine, televisión y teatro y una especialización en teología.
¿Cómo hace un joven como Josh Sisolak para pasar de estudiar en la Universidad de Notre Dame a convertirse en un misionero laico en Bolivia, trabajando entre la gente de la periferia? Su decisión de convertirse en un Misionero Laico de Maryknoll está profundamente arraigada en la afirmación y el legado de sus padres, en particular de su padre, quien fue un modelo de vida de servicio. Su padre también fue un Misionero Laico de Maryknoll. “Crecí escuchando sobre las experiencias de mi padre como misionero laico de Maryknoll y el impacto que esto tuvo en su vida y en la formación del carácter y la fe que tiene hoy. Mi padre ha sido un gran modelo a a seguir para mí y un ejemplo de cómo vivir como Cristo nos llama a vivir. Es a través de él que pude entender lo que significa ser un misionero laico de Maryknoll, y así tomar la decisión de que si me sentía llamado a serlo”.
En aquel tiempo, como el pueblo estaba en expectación y todos pensaban que quizá Juan el Bautista era el Mesías, Juan los sacó de dudas, diciéndoles: “Es cierto que yo bautizo con agua, pero ya viene otro más poderoso que yo, a quien no merezco desatarle las correas de sus sandalias. Él los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego”. Sucedió que entre la gente que se bautizaba, también Jesús fue bautizado. Mientras éste oraba, se abrió el cielo y el Espíritu Santo bajó sobre él en forma sensible, como de una paloma, y del cielo llegó una voz que decía: “Tú eres mi Hijo, el predilecto; en ti me complazco”. Lucas 3, 15-16. 21-22
5. REFLEXIONES SOBRE LA LECTURA
¿Cómo crees que se sintió Jesús cuando escuchó a Dios, como un padre amoroso, decir: “Tú eres mi Hijo amado; en ti me complazco”? Estas son palabras que la mayoría de nosotros anhelamos haber escuchado de nuestros propios padres. Y como padres, a algunos de nosotros nos cuesta dar esa afirmación a nuestros propios hijos. Pero cuando sucede, trae sanación, crecimiento y transformación. Fue la firme convicción de Jesús de que era amado por Dios lo que le dio la inspiración y el coraje para llevar a cabo su ministerio de llevar amor a quienes se sentían no amados. Como discípulos misioneros, estamos llamados no solo a escuchar a Dios decirnos esas palabras amorosas, sino a creerlas profundamente en nuestros corazones, para que nosotros también podamos hacer lo que hizo Jesús. Solo podemos dar el amor que hemos recibido.
Estamos llamados a ser la voz afirmativa de Dios. ¿A quién, en concreto, nos invita el Espíritu Santo a exaltar hoy con amor, a través de tus palabras y acciones?
Esta semana, sé un discípulo misionero de la esperanza y acércate a una persona que parece tener dificultades para creer que es digna/o de amor. También, considera apoyar la causa de los Misioneros Laicos de Maryknoll que tienen familias en misión, ofreciendo tu tiempo, oraciones o recursos.
Oh Señor, danos la inspiración y la fuerza para tomar el amor que hemos recibido y compartirlo con los demás. Ayúdanos a confiar en que el amor que damos nos será devuelto multiplicado por diez. Haznos tus discípulos misioneros del amor en un mundo herido.
