LA LUZ BRILLA EN LA OSCURIDAD
Oh Santo Niño Jesús, llena nuestros corazones de tu luz y esperanza. Ayúdanos a reconocer tu presencia en nuestras luchas y a compartir tu amor con los necesitados. Amén.
Comparte una historia sobre alguien que apareció inesperadamente como un rayo de luz y esperanza durante un momento en el que estabas deprimido o desesperado.
3. HISTORIAS ALREDEDOR DEL MUNDO
El padre Daniel Kim de Maryknoll da la Primera Comunión a los jóvenes feligreses de la Iglesia de Santa María en Hunghom, Kowloon, Hong Kong. (Nile Sprague/Hong Kong)
El padre Daniel Kim, MM, quien actualmente presta servicio en Hong Kong, es testigo del profundo poder de la esperanza, especialmente en lugares ocultos y humildes. Así como Jesús trajo la luz al mundo a través de su nacimiento en sencillez, hoy muchos sufren en silencio, como la creciente población sin hogar en Hong Kong. El padre Kim enfatiza que la mayor tragedia no es el sufrimiento en sí, sino el sufrimiento solo. En el Año de la Esperanza, el Papa Francisco nos llama a ser discípulos misioneros, compartiendo el amor de Dios a través de acciones compasivas. Como discípulos misioneros, estamos invitados a encarnar la luz de Jesús, ofreciendo esperanza y transformando la desesperación de los marginados.
En el principio ya existía aquel que es la Palabra, y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. Ya en el principio él estaba con Dios. Todas las cosas vinieron a la existencia por él y sin él nada empezó de cuanto existe. Él era la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en las tinieblas y las tinieblas no la recibieron. Aquel que es la Palabra era la luz verdadera, que ilumina a todo hombre que viene a este mundo. En el mundo estaba; el mundo había sido hecho por él y, sin embargo, el mundo no lo conoció.
Vino a los suyos y los suyos no lo recibieron; pero a todos los que lo recibieron les concedió poder llegar a ser hijos de Dios, a los que creen en su nombre, los cuales no nacieron de la sangre, ni del deseo de la carne, ni por voluntad del hombre, sino que nacieron de Dios. Y aquel que es la Palabra se hizo hombre y habitó entre nosotros. Hemos visto su gloria, gloria que le corresponde como a unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Jn 1:1-5, 9-14
5. REFLEXIONES SOBRE LA LECTURA
En el Evangelio de Juan, Jesús entra en el mundo como la luz que disipa las tinieblas. El Papa Francisco, en el Año de la Esperanza, nos llama a ser discípulos misioneros que lleven esta luz a los demás, especialmente a los marginados. Especialmente durante los días festivos, algunas personas se sienten solas e incluso deprimidas. Como Jesús, estamos invitados a salir al encuentro de los que sufren, ofreciendo esperanza a través de actos de amor, solidaridad y cuidado. Ayudamos a los demás a experimentar el amor de Dios escuchando con compasión, sirviendo con humildad y compartiendo la paz de Jesús. A través de nuestras acciones, llevamos la luz del amor transformador de Dios a los lugares de oscuridad, convirtiendo la desesperación en esperanza.
¿Cómo está invitándote el Espíritu Santo a ti y a tu comunidad a ser luz, como una fuente de esperanza y apoyo para otros en sus momentos de lucha en la oscuridad?
Los días festivos pueden ser difíciles para algunas personas, en particular para quienes están solas. Acércate esta semana a alguien que pueda estar pasando por un momento difícil, ya sea a través de un mensaje, una llamada telefónica o un simple acto de bondad. Escúchalo y recuérdale que, a pesar de sus desafíos, siempre hay esperanza en el amor y la presencia de Dios.
Jesús, luz nuestra, a través de tu encarnación abrazaste nuestra humanidad con amor y compasión. Que tu ejemplo nos inspire a estar presentes para los demás, compartiendo tu esperanza y tu luz en todo lo que hacemos. Amén.
